Fue una de las primeras maravillas descubiertas por los exploradores. Con el paso del tiempo el agua abrió un hueco por debajo de la piedra dejando intacto un puente de piedra, bajo el cual pasa todo el caudal del río. Desde el puente se puede sentir el viento que produce el agua al caer. La cascada tiene cuatro metros de altura y una piscina natural de 3 a 4 metros de profundidad.